Los colores, los estampados, las texturas…es toda una experiencia entrar en una tienda de telas , verse rodeada de tantos colores y sentir como tu imaginación empieza a volar. Dónde hay un trozo de tela ves un pantalón o un vestido. Luego buscas la manera de combinar tu pantalón con otra tela y te paseas por toda la tienda con el rollo completo buscando con qué combinarlo. Es toda una experiencia.
Ya sé que la mayoría de las veces el proceso es al revés. Cuando entras en la tienda de telas ya vas buscando algo en concreto para hacer el pantalón o el vestido que has visto en una revista de patrones. Pero yo te recomiendo que lo hagas de la otra forma, es mucho más divertido y creativo.
Para mí siempre ha sido como un juego, parte de manualidades, parte de creatividad. Siempre me ha resultado muy relajante y también gratificante.
Es porque la costura es de esas manualidades, si así podemos llamarlo, que más satisfacción te da con los resultados, ya que lo puedes lucir, y nunca va a ser lo mismo una prenda de ropa que tu te has hecho, que una que te compras, no solo porque va a ser única, sino también porque la vas a cuidar con más cariño.
Me acuerdo cuando llegaba a casa del colegio y mi madre había comprado una revista nueva, no me quitaba ni los zapatos.Tenía que verla entera aunque me muriera de hambre y tuviera la comida sobre la mesa.
Recuerdo sobretodo cuando era de disfraces, con todos aquellos colores y telas llenas de brillos y lentejuelas! Y eso que a mí nunca me ha gustado disfrazarme, ni las lentejuelas, pero eran tan alegres aquellas revistas que cautivaban.
En aquella época había muchas tiendas de telas y con telas de todo tipo, desde las más sencillas a las de mejor calidad. Me acuerdo sobre todo de las telas para abrigos, eran preciosas!, ahora todavía hay buenas tiendas pero es más difícil encontrarlas.
Cuando estás metido en un proyecto de costura, te sientes totalmente inmerso en él. Y esa concentración te da una gran tranquilidad. Te pasa el tiempo volando y no ves el momento de dejarlo, y cuando por fin lo terminas la satisfacción es enorme, sobretodo si te ha quedado como esperabas o mejor de lo que esperabas.
Ya sé que coser no es algo que se aprenda de la noche a la mañana. Necesitas ,como con todas las cosas, aprender y practicar, pero te aseguro que merece la pena. Hoy en día hay muchos cursos por internet muy fáciles que te puedes ayudar a empezar en este mundo tan apasionante. Empieza por algo sencillo, una blusa o una falda que no tenga mucha complicación. Más adelante iras aprendiendo a realizar prendas más difíciles.
Creo que lo importante es empezar e intentar hacerlo lo mejor posible. Ya verás que por mal que te quede seguro que te quedará mejor que la mayoría de la ropa que encuentras en las tiendas, que normalmente están bastante mal rematadas y las cremalleras y los ojales están de pena.
Esa es una de las diferencias importantes que te vas a encontrar cuando te haces tu propia ropa. Que si le pones interés y eres detallista, tus prendas van a tener una confección mucho mejor que las que te compras. Por supuesto depende de la tienda y la marca, pero hasta en buenas marcas a veces te encuentras prendas que no tienen unos buenos acabados.
Otras de las ventajas, que ya he mencionado antes, es que no vas a encontrar a nadie que lleve la misma prenda que tú. Se podrá parecer ,pero igual imposible! Y eso es una gran ventaja porque hoy en día es raro no cruzarnos con gente que lleva ropa como la nuestra. Ya sabemos que hay una serie tiendas donde compramos todos!